Más de 90 organizaciones de la sociedad civil de Brasil construyeron una agenda común y solicitan a las plataformas digitales medidas específicas contra la desinformación.

El jueves 7 de julio, más de 90 organizaciones de la sociedad civil e investigadores académicos brasileños lanzaron un documento que solicita a las plataformas de medios digitales que implementen medidas más efectivas para proteger la integridad del proceso electoral de 2022 en Brasil.

El documento contiene más de veinte recomendaciones sobre:

• Moderación de contenidos.
• Bibliotecas de anuncios.
• Violencia política contra grupos minoritarios.
• El combate a redes de desinformación sobre la agenda ambiental.

El documento apunta que, «aunque haya diferencias entre ellas, ninguna de las plataformas de redes sociales tiene políticas totalmente adecuadas para los desafíos que ya se enfrentan en este proceso electoral en curso». Las organizaciones solicitan que sean perfeccionados los mecanismos de detección de contenidos problemáticos y los discursos de odio expresados en el idioma portugués, para proteger a grupos sociales vulnerables de asedios digitales durante el propio proceso electoral.

“Las informaciones falsas o engañosas afectan la dimensión colectiva de la libertad de expresión, reconocida por el Sistema Interamericano de Derechos Humanos, que está basada en la expectativa de que la sociedad pueda estar bien informada”, afirma el documento. “En el caso de los procesos electorales, la desinformación también tiene un enorme impacto, como el potencial de afectar al orden democrático. Enn este sentido, esperamos que las plataformas hagan sus mejores esfuerzos para proteger, al mismo tiempo, las dimensiones individuales y colectivas de la libertad de expresión, así como el necesario equilibrio entre este y los demás derechos constitucionales”, prosigue el texto.

Algunas de las principales contribuciones del documento son un conjunto de recomendaciones y directrices que sugieren cambios que podrían ser hechos inmediatamente para alcanzar a proteger la integridad electoral en este año en Brasil. Según las entidades de la sociedad civil, las plataformas no deben permitir contenidos con afirmaciones infundadas de fraude electoral, debido a la capacidad de minar la confianza en el sistema electoral y en el proceso democrático. Tampoco se debería permitir la publicidad paga, ni la recomendación de contenidos que pongan en duda la integridad del sistema electoral, y no deberían dar tratamiento excepcional a los actores políticos en la moderación de contenidos engañosos (o ausencia de ellos). También deberian crearse canales directos de comunicación con la Justicia Electoral y el Ministerio Público Electoral para el caso de una crisis institucional, así como dejar explicitado cuán rápidamente actuarán al recibir denuncias de desinformación hechas ante el TSE (Tribunal Superior Electoral).

Sobre la biblioteca de anúncios (herramienta que puede ser usada por cualquier persona para consultar anuncios publicitados a través de la plataforma), el documento demanda la inclusión de investigadores brasileños en la plataforma Facebook Open Research and Transparency, lanzada en el mes de mayo de 2022 en los Estados Unidos y el Reino Unido. Demanda también que Google expanda su biblioteca de anúncios, permitiendo incluir los candidatos a cargos estaduales. Además, demanda que sean clasificados como contenido sensible anúncios relacionados a temas que estarán a la orden del día durante la elección, aproximando los criterios, a aquellos que las mismas plataformas ya usan en los Estados Unidos.

El documento trae, además, dos capítulos con recomendaciones específicas de políticas para combatir la violencia contra mujeres, personas negras, indígenas, quilombolas y LGBTQIA+ y de políticas para combatir la desinformación sobre temas medio ambientales, clima y pueblos originarios – no monetizando, ni permitiendo la publicidad de contenidos negacionistas de la crisis climática, o de canales con desinformación socioambiental.

El documento está firmado por organizaciones y redes como Abong, Coalizão Direitos na Rede, Coalizão Negra por Direitos, Observatório do Clima, entre otras, y cuenta con el apoyo de Pacto pela Democracia, Conectas y de la Associação Brasileira de Jornalismo Investigativo (Abraji).

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